Según un informe elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), a la hora de acceder a financiamiento el 27,9% de las PyMEs encuestadas indicó que los requisitos son demasiado exigentes, 21,3% no considera las condiciones establecidas como favorables, un 15,6% desconoce los programas destinado al sector y para un 13,1% la documentación legal o impositiva requerida es una traba a la hora de acceder a un crédito.
El trabajo muestra que de las PyMEs entrevistadas, el 46% accedió a algún tipo de financiamiento en los últimos tres años. Entre ellas, el 89% consideró la experiencia como buena (42%) o regular (47%). Ese financiamiento fue en su mayoría destinado a la adquisición de materia prima y capital de trabajo (51%).
Asimismo, un 14% dice haber usado el crédito para la incorporación de tecnología. Hubo un 19% que indicó haberlo utilizado para otros fines, entre los cuales los más mencionados fueron: pago de sueldos y refinanciación de deuda, lo que indica un contexto complicado en la empresa y ampliación o readecuación de las instalaciones.
En el caso de los encuestados que accedió a algún instrumento de financiación por la emergencia vinculada a la pandemia por Covid-19: el 50% de los participantes hicieron uso de algún programa de financiación de urgencia por el ASPO, accedieron al Programa ATP mediante la medida del salario complementario y contribuciones patronales. Un 29,8% a la línea de financiamiento al 24% implementada por el BCRA, y un 13,1% utilizó los créditos para monotributistas y autónomos a tasa 0%.
Ante la posibilidad de acceder a nuevas herramientas de financiamiento, el 19,4% manifestó que las destinaría para modernizar los recursos tecnológicos de su empresa, el 19,1% para la adquisición de capital de trabajo, un 16,1% de los participantes afirmó que se utilizaría en la incorporación de dispositivos, tecnología o maquinaria para eficientizar el uso de los recursos energéticos y disminuir sus costos. 12,4% lo necesitaría para ampliar o readecuar sus instalaciones.