Un informe elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), estimó que, debido a los altos rindes de la región, la producción de trigo será de 22,1 millones de toneladas, superando en un 30% a la de 2020.

De este modo, la cosecha se encamina a marcar un nuevo récord, a pesar de las dificultades que soportó el país en algunas regiones agrícolas del país, con sequías y heladas tardías. Las exportaciones del cereal y de su harina, rondarán los US$4070 millones, cifra histórica sustentada, además, por los buenos precios internacionales. Significa un ingreso de US$1599 millones respecto del año anterior.

La proyección informada por la BCR, estimaba semanas atrás 20,4 millones de toneladas. Sin embargo, al avanzar la cosecha sorprenden los rendimientos del cereal. Los técnicos han explicado en el último tiempo que una buena fertilización estuvo detrás de los resultados que ahora se van visualizando en los monitores de las cosechadoras.

 El trabajo señala que “los ajustes (para una mayor producción) son por la cosecha: con un 57% de avance, los promedios están sorprendiendo. La campaña también alcanzó un nuevo nivel de siembra: es la mayor de los últimos 19 años, con 100.000 hectáreas más y 6,9 millones de hectáreas implantadas. Los promedios de rindes están entre las marcas más altas, muchos son récords en el centro de la región pampeana, como en el centro y sur de Santa Fe. Los nuevos ajustes elevan el rinde promedio de argentina de 31 quintales por hectárea (qq/ha) en noviembre a 33,6 qq/ha en diciembre”.

 “En este ciclo no se fertilizó para tener un rinde objetivo de 45 a 50 quintales; este año el objetivo fue alcanzar los 60 a 80 qq/ha”, indica la BCR y agrega que el otro hecho “es que el pequeño productor de baja escala este año hizo una inversión en tecnología inédita y en fertilización se puso al mismo nivel que los productores de punta”.

La BCR, calculó que el 31% de la oferta triguera se destinará a la molinería y un 58% se exportará como grano. En ese sentido, Brasil es el primer comprador con el 45%.

Expresó también que la actividad genera 387.459 empleos, equivalente al 11,6% de todo lo contemplado por las cadenas agroalimentarias argentinas.

En ese sentido, precisó que la producción primaria comprende a 65.262 puestos de trabajo. La etapa de comercialización 147.147 personas y entre otros sectores, en la industrialización del cereal ocupa a 135.041 trabajadores. 

Las exportaciones de trigo argentino en la campaña 2021/22, alcanzarán un volumen de 13 millones de toneladas, por un valor FOB de US$ 3891 millones. A ello se suman US$179 millones por harina del cereal. En cuanto a los derechos de exportación, para el Estado la previsión es que en 2022 ingrese a sus arcas el equivalente a US$461 millones, sumando el cereal y la harina.