En el Día de la Industria, la Unión Industrial Argentina (UIA) presentó en Córdoba el Nuevo Contrato Productivo, un decálogo que establece diez principios orientados a fortalecer la competitividad, la inversión y la inserción internacional del país.
El presidente de la entidad, Martín Rappallini, remarcó que la industria necesita un marco de previsibilidad. “Proponemos un Nuevo Contrato Productivo: un acuerdo entre Estado, empresarios y trabajadores para que Argentina vuelva a crecer produciendo”.
El dirigente enumeró los principios establecidos en el decálogo, que incluyen la seguridad jurídica, el orden macroeconómico, un sistema impositivo competitivo, la modernización laboral, el federalismo productivo, la educación vinculada a la tecnología, la infraestructura y logística, el financiamiento productivo, la inserción internacional inteligente y la sustentabilidad.
Desde la perspectiva de Eugenia Ctibor, presidenta de la Unión Industrial del Gran La Plata, explicó que el documento presentado es un instrumento para ordenar el debate público. “El decálogo es para fortalecer un nuevo sistema productivo”, remarcó.
Asimismo, explicó que “la idea es que los 10 puntos los podamos replicar y trabajar con los gobiernos y con toda la sociedad, para que se entienda qué es lo que la industria hace y lo que necesita. Son diez puntos muy sencillos, muy claros, hasta diría obvios, pero son ordenadores para tener las conversaciones que tenemos que tener con los distintos actores de la sociedad”.
Por su parte, la empresaria cordobesa Isabel Martínez y ex vicepresidenta de la Unión Industrial de Córdoba, que además recibió el premio a la Calidad por su firma Fumiscor, señaló que el documento presentado debe traducirse en acciones. “El decálogo que la UIA presentó en Córdoba en el festejo del Día de la Industria funciona como los 10 mandamientos de la competitividad industrial, es una guía clara de los pilares que el país necesita consolidar para generar desarrollo sostenido“.
Sin embargo, remarcó que “lo verdaderamente importante en este momento no sólo es tener el diagnóstico o la hoja de ruta, sino dar el paso hacia la acción concreta. La industria requiere que estas ideas se traduzcan en políticas, acuerdos y proyectos tangibles que impulsen la productividad, la inversión y el empleo”.
Transformar la producción
El Nuevo Contrato Productivo busca instalarse como una hoja de ruta común entre el Estado, las empresas y los trabajadores. La propuesta apunta a que la industria argentina pueda competir en igualdad de condiciones en los mercados internacionales, mejorar la productividad interna y sostener el desarrollo federal.
“Cuando hablamos de industria, hablamos de millones de familias que dependen de que una máquina arranque cada mañana. Hablamos -con orgullo- de un sector que genera oportunidades y promueve el desarrollo de cada comunidad”, señaló Rappallini.
La UIA subrayó que no se trata solo de un diagnóstico, sino de un compromiso institucional con diez principios que abordan temas estructurales: desde la estabilidad macroeconómica hasta la innovación tecnológica, pasando por la inversión en infraestructura y la sustentabilidad ambiental.
Con la presentación del decálogo industrial en Córdoba, la dirigencia fabril busca que este marco sea la base de consensos políticos y sociales que permitan construir un camino de crecimiento sostenido. El desafío, según remarcan los industriales, será transformar este documento en una agenda concreta con medidas aplicables a corto y mediano plazo.