Con la llegada de la segunda tanda de tolvas cerealeras 0KM, se completó la compra de 180 unidades ferroviarias que fortalecerán el transporte de granos en Argentina. La operación se realizó mediante una licitación internacional y representa un avance estratégico en la modernización del sistema ferroviario de cargas.
El sábado pasado, el puerto de Buenos Aires fue escenario de un imponente operativo para descargar las tolvas destinadas a Trenes Argentinos Cargas (TAC/BCyL). Esta segunda entrega marca la incorporación definitiva del material rodante, clave para mejorar la logística de granos hacia los puertos exportadores.
En las próximas semanas, cuatro formaciones de 45 vagones cada una, acompañadas por locomotoras reparadas en el taller de Córdoba, comenzarán a circular por la línea Belgrano transportando cereales.
Cada nuevo vagón de trocha angosta tiene una capacidad de 55 toneladas netas, lo que implica un aumento de 400.000 toneladas anuales en la capacidad de carga. Este refuerzo es fundamental para el agro argentino, especialmente en un año donde, según Gustavo Idígoras, presidente de Ciara-CEC, el sector podría liquidar hasta US$ 10.000 millones adicionales gracias a las 15,5 millones de toneladas de soja y 8,7 millones de toneladas de maíz aún disponibles.
Provincias beneficiadas y puertos de destino
La línea Belgrano Cargas atraviesa provincias clave como Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Chaco, Tucumán, Santiago del Estero, Salta, Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires. Los granos que se transporten en estos vagones tendrán como destino final los puertos del Gran Rosario, principal polo exportador agroindustrial del país.
El convenio firmado entre TAC/BCyL y las empresas Cofco International, Viterra y Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) permitió adelantar fletes por US$ 22 millones. Con ese financiamiento se concretó la adquisición de los vagones graneros 0KM a la firma CMEC, en el marco de la Licitación Nacional e Internacional 20-2023.
Además de la línea Belgrano, Trenes Argentinos Cargas opera la línea Urquiza, que conecta la Mesopotamia, y la línea San Martín, que une los puertos de Santa Fe con la región de Cuyo. Estas inversiones en material rodante apuntan a consolidar un sistema ferroviario más eficiente y competitivo para la exportación agroindustrial.