El presidente de la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGERA), Marcelo Fernández, afirmó que “el stock de cheques diferidos negociados por las Pymes en poder de los bancos ronda los $ 220.000 millones”.
Más de 80 organizaciones de pequeñas y medianas empresas suscribieron un documento en el que se detalla que las entidades financieras no aceptaron el pago o cobro de 40.000 millones de pesos, una cifra que destruye empleos. Agregaron que en mayo, existen vencimientos por entre 80 y 100.000 millones de pesos.
Ante la situación provocada por la pandemia del coronavirus, denunciaron que en abril, los bancos rechazaron el 50% de los cheques diferidos, lo que representan unos 40.000 millones de pesos.
“A lo dicho se suman los valores en cartera que no fueron depositados y las facturas emitidas que deberían haber sido cobradas en este período”, indicaron. La primera propuesta que integra la iniciativa es “que las entidades financieras actúen como banca de crédito y cubran los cheques de aquellos clientes que siempre han cumplido para que se acrediten en las cuentas que lo depositaron”.
Piden además, el otorgamiento de “un plazo lógico por estas deudas con baja tasa de interés tomando como referencia el 24% que ofrece el Gobierno”; y que el BCRA, de ser necesario modifique normativas, para que los bancos no tengan dificultades para facilitar la operatoria mencionada.
Los representantes del sector pidieron además “reperfilar las deudas de las Pymes con las entidades financieras” y que el Estado destine fondos “para que no se corte la cadena de pagos bajo ningún concepto”.
El documento puntualizó que los tres eslabones que sufren la inactividad económica son el comercio, el distribuidor mayorista o la industria Pyme y la mediana o gran empresa proveedora de los anteriores.
Además de CGERA, firmaron el documento la Confederación General Económica (CGE); la Asamblea de los Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme); la Mesa Nacional de Unidad Pyme; la Cámara de la Industria del Calzado (CIC); la Asociación de Concesionarios de Automotores (Acara); y la Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica Argentina (Camima).
Otras entidades firmantes son la Cámara Argentina de Industria del Juguete; la Cámara Argentina de Industrias Ópticas y Afines; la Cámara Argentina de Fabricantes de Avíos e Insumos para la Confección y Marroquinería; la Cámara Argentina del Gas Natural y Comprimido; y federaciones económicas y empresarias de Chaco, Chubut, Río Negro, Santa Fe y Catamarca, entre otras.
El texto se suma a los distintos reclamos que en los últimos días vienen realizando las Pymes frente al parate de la actividad económica producido por la pandemia del coronavirus y el aislamiento social obligatorio decretado para evitar su propagación.