Un informe de evolución financiera y crediticia realizado por el departamento de Estudios Económicos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA) reflejó que en noviembre el crédito PyME creció 73% en términos interanuales, a precios constantes. De esta forma, fue el mayor aumento de los últimos tres años y los préstamos para este sector crecieron más que el promedio.
Además, esta herramienta financiera alcanzó los niveles registrados en octubre de 2018 y se recuperó de la caída observada en los 12 meses de 2019. También, en noviembre, el stock de crédito PyME en términos reales, fue 68% superior al registrado al comienzo de ese mismo año.
Asimismo, el relevamiento que llevó a cabo la entidad empresaria muestra que en el caso del stock de crédito en pesos al Sector Privado No Financiero (SPNF) creció en noviembre 10,4% en términos interanuales, pero se encuentra en el mismo nivel desde agosto y un 30% inferior al promedio de 2018.
A su vez, en el último mes del 2020 el 73% de los montos operados por PyMEs se explicó a través de tres instrumentos financieros: descuento de cheques (35%), préstamos a sola firma (19%) y adelanto en cuenta corriente (19%). En ese sentido, los montos operados crecieron para los tres instrumentos en términos reales en comparación con noviembre.
En cuanto a las tasas de interés de descuento de cheques y adelanto en cuenta corriente bancarias hubo un aumento en diciembre. Al mismo tiempo, las tasas de préstamos a sola firma descendieron 2 p.p en promedio, principalmente por el aumento en el volumen de créditos a tasa subsidiada.
Por otra parte, en el Mercado de Valores la tasa de descuento de cheques mostró en las dos primeras semanas de enero una estabilidad relativa en el segmento avalado. Las tasas van desde 28,7% TNA hasta 37,8% TNA dependiendo del vencimiento del documento. Paralelamente, los cheques de cadena de valor han mostrado un comportamiento descendiente pero las tasas para este segmento son notablemente superiores.
Otro punto del documento se refirió al régimen de descuento de facturas de crédito electrónicas (FCE) que resultó en las últimas cuatro semanas inferior a la tasa de descuento de cheques cadena de valor, pero sensiblemente superior a la del segmento avalados.