El Sindicato Argentino de Obrares Navales y Servicios de la Industria Naval de la República Argentina (SAONSINRA), a través de un comunicado suscripto por su secretario general, Juan Speroni, se expresó sobre la decisión del ministerio de Transporte de la Nación que considera a la industria naval como “una herramienta esencial para la economía del país”.
El texto refiere directamente a la decisión del ministerio de Transporte de la Nación y a la resolución de la Subsecretaria de Puertos, Vías Navegables y Marina Mercante N° 60/2020, Comité de Crisis Prevención Covid- 19 en el Transporte Fluvial, Marítimo y Lacustre, que establece y considera a la Industria Naval Argentina como una herramienta esencial para la economía del país, en tanto Astillero o taller naval constituyen elementos imprescindibles en la cadena de valor de la producción del comercio exterior, actividades portuarias, embarcaciones de suministros de combustibles, embarcaciones para la obra pública, pesca y otras actividades que hacen al sostenimiento de logísticas esenciales para la actual coyuntura y como tal exceptuadas de la cuarentena laboral actualmente en curso.
“Esta determinación del ministerio de Transporte no hace otra cosa que confirmar la histórica posición de este sindicato referido al carácter estratégico de la Industria Naval Argentina y a su pertenencia al complejo marítimo, conformado por la marina mercante, las actividades portuarias y sus vías navegables”, señala.
Seguidamente indica que “a los efectos de reiniciar la actividad naval tal lo instruye la resolución citada y en un todo de acuerdo con las exigencias del ministerio de Salud de la Nación y de las recomendaciones emitidas por la OMS, hemos decidido establecer un protocolo de actividad que además de las consideraciones generales, contemple aspectos específicos de nuestra industria”.
Agrega que “este protocolo tendrá como punto de partida el que fuera diseñado en conjunto entre el SAONSINRA, la participación de sus asesores y SPI Astilleros con sus asesores, rubricado por ambas partes; con el acuerdo firmado de las cámaras pesqueras, enmarcado en la necesidad manifiesta por CAIPA y CEPA. En dicho documento se acordó que el sector empresario naval mantendrá como prioridad en el esquema de recuperación de la actividad y que el punto de partida será el 13 del actual mes. Entendemos que el antedicho documento debe ser el eje rector para que los otros sectores de la Industria Naval constituyan modelos semejantes, para aportar valor a este documento a través de sus representantes a la Comisión Directiva del SAONSINRA”.
Asimismo, informa “a los trabajadores navales, a las empresas que nuestros representados integran y a las cámaras del sector, que con motivo al inicio de actividades que tendrá el sector de la Industria Naval, el mismo deberá ser dentro del marco que nos permita un ordenado comienzo de los trabajos sin perder como objeto a seguir el de desarrollar todas las acciones necesarias que contribuyan a garantizar la salud y bienestar de todas las personas que forman parte de nuestra actividad en los Astilleros y talleres Navales donde ejercemos nuestra fuerza laboral”.
“En este contexto señalamos que la salud y la producción tienen que tener una administración responsable de todos los actores de la Industria Naval para cuidar la vida de los trabajadores y sus familias, al mismo tiempo satisfacer las demandas del comercio exterior, la pesca, la logística, y el mantenimiento de todas las industrias esenciales”, dice el documento.
Finalmente manifiesta que “estamos en una coyuntura específica, debemos actuar en consecuencia a la altura de lo que le país nos demanda, pero quiero decirles que seguiremos en la lucha de nuestras convicciones: no a la importación de embarcaciones usadas que afecte a la producción nacional y a la soberanía de nuestro litoral fluvial y marítimo; renovación de la flota pesquera; defensa del litoral marítimo, construcción de barcazas tanque de combustibles- cargas secas; barcos polares, de investigación, para nuestra defensa y seguridad; financiamiento y beneficios fiscales necesarios para el impulso del sector”.
