La propuesta se dio a conocer en el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y de Cabotaje Marítimo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La utilización de este tipo de buques beneficia a la logística, abarata notoriamente los costos de transporte y protege al medio ambiente, ya que son menos contaminantes.
La presentación que encabezó Julio González Insfrán, titular de la entidad gremial, acompañado por el Capitán Jorge Bianchi, Daniel De Monte de Astillero Río Paraná Sur, Silvia Martínez, presidenta de la Cámara de la Industria Naval Argentina (CINA), Juan Alberto Ríos, director de Fluvialmar y Verónica Iesu, abogada maritimista, quienes se explayaron sobre distintos aspectos del proyecto.
González Insfrán explicó que el interés central del sindicato que dirige es recuperar la marina mercante nacional ya que es mucho lo que nuestro país deja de ganar por no tener la bandera argentina en funcionamiento en ríos y mares. En cuanto al proyecto en particular explicó que la idea de construir estos barcos propulsados a GNL es la de ganar competitividad para nuestra logística, ya que estos barcos ahorran hasta un 65 % de combustible. “Quien los tenga primero impondrá una tendencia a la baja en los fletes, fundamental para recuperar el protagonismo de nuestros buques”, aseguró.
Brindó detalles sobre el presente de la marina mercante nacional. “Argentina tiene una gran salida de exportación desde el sector agrario, nada menos que el 9% del transporte mundial. pero casi todo eso se moviliza con la flota internacional, no con flota argentina. Los 34 millones de toneladas de carga que se mueven por la Hidrovía se hacen en buques y barcazas que no son de bandera argentina, alrededor de 4400 buques de ultramar al año, que no son transportadas por Argentina: tenemos que preguntarnos por qué pasa eso y revertirlo”.
Por su parte Daniel De Monte, titular de Astillero Rio Paraná Sur, que tiene a su cargo el proyecto técnico del remolcador de 4500 a 6000 HP, aseguró que el proyecto 2020 del barco ya está listo y que, si la decisión de hacerlo aparece y el financiamiento necesario se consigue, el primer buque podría estar listo en sólo 14 meses. Además, dio explicaciones sobre la forma en que se construirá el barco en cuestión, con detalles técnicos sobre los tanques a utilizar y los motores, que han sido presupuestados por el grupo Wartzila, uno de los líderes mundiales en la materia, cuyos ejecutivos estaban presentes en la reunión. Aseguró que la evolución del proyecto es permanente, explicó que hoy está listo el proyecto 2020 de este buque pero que sin duda seguirá avanzando incorporando innovaciones tecnológicas que lo hagan cada vez más eficiente, económico, sustentable y funcional.
Seguidamente, la titular de la CINA, Silvia Martínez, señaló que “con iniciativas como estas se logrará la recuperación de mano de obra, para la industria local que podría avanzar en cosas como la sustitución de importaciones, la utilización de energías más amigables con el medio ambiente y la multiplicación del trabajo para proveedores desde las Pymes que tanto lo necesitan en esta Argentina.
“Nuestro país puede ser en el futuro un “hub logístico” como centro de provisión de energía de GNL, ya que hay buques en todo el mundo que utilizan este combustible y que hoy no pueden llegar a Argentina. Pero con el desarrollo de este proyecto, podrán hacerlo también en nuestro país, junto a los buques que logremos construir aquí ayudando a que se contamine menos y que se mejoren notoriamente los costos de la cadena logística”, explicó Verónica Iesu, titular de la consultora Mercuria Unione.
Finalmente, Juan Alberto Ríos, director de Fluvialmar, afirmó que apoya el proyecto ya que les brinda la posibilidad de ser más competitivos y poder recuperar tráficos que en los últimos años han venido perdiendo frente a terceras banderas u otros medios de transporte como el camión.
