El precio del barril de crudo tipo WTI cerró a u$s 63,82 después de que en las últimas ruedas protagonizara fuertes desplomes.
El petróleo de Texas (WTI) subió 1,2% y cerró en u$s 63,82 el barril un día después de haber protagonizado un fuerte desplome y tras conocerse este martes un dato mejor de lo esperado sobre la economía estadounidense.
Al cierre de la sesión en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del petróleo WTI para entrega en enero del año próximo subieron 77 centavos respecto a la clausura del lunes.
El crudo de referencia en Estados Unidos recuperó parte del terreno perdido la víspera tras publicarse ayer que los inventarios de los mayoristas se elevaron un 0,4% en octubre, al tiempo que sus ventas aumentaron un 0,2%.
La suba de los inventarios es algo mayor a la prevista por los analistas, que habían calculado un 0,2%, y se consolida la tendencia en el repunte de este indicador, que en septiembre también creció un 0,3%, y las ventas lo hicieron en un 0,2%.
El precio del crudo de Texas está muy por debajo del máximo anual de los 102 dólares alcanzado a fines de junio. Comenzó a caer desde entonces, en un descenso que se agudizó a fines de septiembre pasado, por un exceso de oferta de los principales exportadores.
El descenso fue aún mayor después de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) decidiera el pasado 27 de noviembre mantener los actuales niveles de producción, en torno a los 30 millones de barriles diarios.