El llamado a licitación realizado por GVC correspondía a un biodigestor con la capacidad de procesamiento de 20 tn/día de efluentes de tambos, consistente en estiércol más aguas de lavado, generando biogás para su posterior transformación en energía eléctrica a través de un generador de potencia de 19 kW.
La energía obtenida del mismo se prevé utilizar para consumo interno de la planta de clasificación de residuos, considerando la posibilidad a futuro de ser conectada a la red eléctrica, según el procedimiento de interconexión de la Empresa Provincial de la Energía.
Asimismo, el efluente estabilizado (digestato) resultante del biodigestor será aprovechado como fertilizante en un predio cercano, perteneciente a la Planta de Reciclado. A futuro podría incluso utilizarse como abono en plantaciones de frutales, viveros, etc.
En la oportunidad, se presentó una empresa oferente, que propuso un biodigestor de geomembrana (inferior y superior), resultando una cámara de digestión de 360 m3 y un gasómetro de 200 m3. Ahora resta el veredicto del comité evaluador.
Un proyecto, 50 municipios
El Proyecto Agroenergía para Brasil y Argentina, que involucra a Santa Fe, y Sunchales en particular, es gestionado en forma conjunta por GVC con socios locales gubernamentales y no gubernamentales de cinco estados brasileños y cuatro provincias argentinas: Bahia, Minas Gerais, São Paulo, Paraná y Santa Catarina, en Brasil; y Santa Fe, Chaco, Corrientes y Misiones, en Argentina. Dentro de ellos, a su vez, el trabajo se centra en 50 municipios pilotos identificados por los propios gobiernos.
El Gruppo di Volontariato Civile es una organización no gubernamental italiana fundada en 1971, cuyo objetivo es “promover un desarrollo económico y social duradero que beneficie a las personas y sus comunidades”. Con este fin realizan proyectos de diversas temáticas, conjuntamente con gobiernos municipales, provinciales y nacionales, así como también con asociaciones civiles.