Un informe que lleva el sello de la Unión Industrial Argentina (UIA), la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (UIPBA) y la Asociación de Industriales de la Provincia de Buenos Aires (ADIBA), pone el ojo en la caída de la recaudación tanto a nivel nacional como provincial en los meses de febrero y marzo.
El documento señala que la actividad industrial tuvo en enero una primera suba del 0,4% interanual luego de 20 meses de caída pero que el impacto de la pandemia por el Covid-19 será devastador para la actividad local que venía de años en caída.
En ese sentido, el aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por el gobierno nacional, impactó en la recaudación de marzo con un incremento de 35,3% interanual; en febrero había sido 42,6%, quedando 15 puntos porcentuales abajo de la inflación. Esta tendencia se reflejó en todos los componentes de los recursos tributarios.
Lo mismo sucedió a nivel provincial, donde que evidenciado en el freno de la actividad económica interna y la variación anual del total recaudado no logró superar la inflación.
En febrero el Sector Público Nacional tuvo un déficit primario de $27.497 millones, debido a un aumento del gasto de +51,4% interanual. En el mismo mes del 2019, había logrado un superávit de $6.726 millones.
El comercio exterior argentino tuvo en febrero saldo comercial favorable por la recesión y la devaluación que se vivía a nivel local, pero además porque la pandemia ya estaba presente. Así, el superávit comercial del segundo mes del año fue 1.129 millones de dólares.
Covid-19
Se pronostica que el impacto del coronavirus a nivel internacional será histórico, siendo la mayor crisis desde el crash de 1929. El documento señala caída de las exportaciones de bienes y servicios. Lo mismo sucedería con los precios internacionales e interrupciones en las cadenas globales de valor. Sectores como el hotelero, el gastronómico y el transporte serán seriamente afectados.
Para el mercado interno se espera un panorama desalentador con una fuerte caída de la demanda. Además, la falta de financiamiento pondrá en la cuerda floja a las cadenas de pagos.
El Producto Bruto Interno (PBI) se resentirá profundamente, solo produce el 30%. El sector industrial solo está activo en un 24%.